Querido influencers: Menos lobos. Te ofrezco lo que puedo. 

Queridos influencer: partamos de la base que mis intenciones son buenas. Que como marca (o en nombre de la empresa x) te ofrezco lo que puedo. Que quiero ser justo en el trato y que intento que todos ganemos, yo difusión, y tú algún contenido que te pueda interesar, producto y dinero. Sí, soy consciente que tu posicionamiento y tu comunidad te han costado tiempo, esfuerzo y hasta dinero. Sí, soy consciente que hacer una foto y publicar un post y luego gestionar comentarios y reacciones tiene su trabajo. Soy consciente de todo ello y por eso intento que nuestra relación sea de win-win. 

Te pido por favor, querido influencer, que no me presupongas mala gente, un aprovechado que se hace de oro a tu costa ni un caradura de si-cuela-cuela. 

No dudo que has tenido malas experiencias con empresas poco serias que pedían el oro y el moro por nada o que después de todo el trabajo, el trato quedó en agua de borrajas. Pero yo también, como empresa, he tenido malas experiencias con compañeros influencers que tras recibir lo pactado no cumplieron con los mínimos acordados. Y sin embargo, amigo influencer, no te juzgo a ti por la mala praxis de otros. Sería injusto, verdad? 

Querido influencer, a veces, cuando te ofrezco algo como muestras de producto más una remuneración baja (como 50€, por ejemplo), es realmente lo máximo que te puedo ofrecer. No todas las empresas son grandes magnates con beneficios de récord Guiness. A lo mejor soy un autónomo, un emprendedor o una PYME que intenta abrirse un hueco. 

Por supuesto, puedes rechazar mi oferta. Porque es una oferta. 

  • Por supuesto podemos intentar negociar: más producto, un poco más de remuneración, una colaboración de varios post… Entonces podré decidir que como menos colaboraciones y reparto más entre menos gente, por ejemplo. 
  • Por supuesto, entiendo que tengas contratos con mi competencia y que no me puedas ayudar. Es lícito y admiro que respetes el acuerdo; si lo tuvieras conmigo también querría que lo respetaras. 
  • Por supuesto, entiendo que tienes un caché al que, por ahora, quizá, no puedo llegar. Pero quién sabe, puede que en el futuro sí pueda. No te cierres puertas reaccionando con cajas destempladas. 
  • Por supuesto, entiendo que mi producto no te interesa, no te convence, no va contigo o que tienes dudas éticas o lo que sea. Que quizá no tiene nada que ver con tu comunidad. Pero si me planteas tus dudas quizá tenga respuesta. 

Es increíble como los influencer más grandes, con miles y miles de seguidores y representantes te responden «no» con mucha educación. Y como, sin embargo, otros de mil y poco seguidores a los que has contactado humildemente porque te gustaba su perfil (porque te lo curras y antes de contactarles has mirado qué hacen, cómo lo hacen, qué les gusta…) te responden muy indignado y enfadados que tu propuesta es indigna y una vergüenza y otras lindezas que no viene a cuento reproducir. No hace falta. Sé que eres influencer, pero grande, pequeño o mediano, la buena educación y las formas por delante: menos humos, menos lobos caperucita. Que no he visto egos más inflados ni tanta susceptibilidad como en este mundillo. Bastaba con un «No me interesa» o un «mis condiciones mínimas son x». El ego mató al influencer. 

    Querido influencer: Mi puerta está abierta. No me la cierres en los morros, por favor. Hablemos 😉 

      4 comentarios en “Querido influencers: Menos lobos. Te ofrezco lo que puedo. 

      1. mercesori

        Bueno, bueno… si yo te contara, nos vino una influencer con todo su morro a pedir X cosa y se le dijo que había que hablar con central porque no es una práctica que solemos hacer. Le faltó poco para decir textualmente que encima que se rebajaba a hacerlo gratis que qué nos habíamos pensado. Es un post que tengo pendiente de hacer, que los humos hay que bajarlos un poco y más si encima eres tú quién pides algo.

        Le gusta a 1 persona

        Responder
        1. Celia Ramón Wyser Autor

          Ay Mercé, arrieros somos y por el camino nos encontraremos, que dice el refrán. Que si cuando te relajes quieres compartir tu experiencia por aquí, bienvenida, que así todos aprendemos. Tenía un jefe que siempre lo decía: seas quien seas y sepas lo que sepas, ante todo, humildad!!!

          Me gusta

          Responder
      2. Mamá en Bulgaria

        Esos que dices no son influencers, son wannabes. Yo alucino con la cantidad de gente que se cree influencer hoy en día. Parece que la palabrita gusta y muchos no tienen abuela. A muchos habría que decirles, cariño, tu de influencer no tienes nada, puedes sentirte honrado de que te contacte alguna empresa. Y sí, menos lobos.

        Le gusta a 1 persona

        Responder

      Si te ha gustado, ¡COMENTA! Me encantará saber más sobre lo que piensas...